Buenos días, amigos del murciélago.
Hasta ahora, este murciélago estaba algo perdido por estos mundos virtuales. Como estaba de mudanza no tenía internet. ¿Cómo lo he solucionado? Gastándome unas pocas perras en un miniportatil para poder conectarme a cualquier red wifi y actualizar el Blog como toca, con UN CUENTO A LA SEMANA.
Así que intentaré no dar más excusas.
Dicho esto, seguimos con nuestros "MITOS EN BREVE".
Es curioso como la vida de los personajes famosos está plagada de anécdotas jugosas. Y son esas anécdotas las que definen no a la persona, sino al personaje.
Hoy les toca a Charles Chaplin y a Albert Einstein. ¿Sabíais que se conocieron? Que extraña amistad ¿verdad?
Pues bien, espero que este pequeño relatito os ilustre sobre aquella relación.
Ahí va:
En 1931, cuando ya se había aceptado con entusiasmo el cine sonoro, se estrenó en Nueva York “Luces de la ciudad”. Muchos creyeron que Chaplin se había vuelto loco, porque junto al título de la película se proclamaba con alegría: “una comedia romántica muda”.
En su estreno en Hollywood, Chaplin fue acompañado de otro gran provocador; el señor Albert Einstein, que había conseguido romper la barrera entre la luz y la materia.
Cuando terminó la película el público se levantó y estalló una gran ovación. La sorpresa fue que no sólo aplaudían al cómico, sino también al físico.
Einstein miró a Chaplin, sin saber muy bien cómo reaccionar y Chaplin sonrió de medio lado.
“La gente me aplaude a mí porque me entiende”, dijo, “a usted le aplauden porque no le entienden”
Si os ha gustado, ya sabéis cuál es mi precio habitual. Descargad el cuento y enviadselo a vuestros contactos.
Y volved pronto a mi nueva cueva, que aquí os espera...
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
Hasta ahora, este murciélago estaba algo perdido por estos mundos virtuales. Como estaba de mudanza no tenía internet. ¿Cómo lo he solucionado? Gastándome unas pocas perras en un miniportatil para poder conectarme a cualquier red wifi y actualizar el Blog como toca, con UN CUENTO A LA SEMANA.
Así que intentaré no dar más excusas.
Dicho esto, seguimos con nuestros "MITOS EN BREVE".
Es curioso como la vida de los personajes famosos está plagada de anécdotas jugosas. Y son esas anécdotas las que definen no a la persona, sino al personaje.
Hoy les toca a Charles Chaplin y a Albert Einstein. ¿Sabíais que se conocieron? Que extraña amistad ¿verdad?
Pues bien, espero que este pequeño relatito os ilustre sobre aquella relación.
Ahí va:
ROMPIENDO MOLDES
En 1931, cuando ya se había aceptado con entusiasmo el cine sonoro, se estrenó en Nueva York “Luces de la ciudad”. Muchos creyeron que Chaplin se había vuelto loco, porque junto al título de la película se proclamaba con alegría: “una comedia romántica muda”.
En su estreno en Hollywood, Chaplin fue acompañado de otro gran provocador; el señor Albert Einstein, que había conseguido romper la barrera entre la luz y la materia.
Cuando terminó la película el público se levantó y estalló una gran ovación. La sorpresa fue que no sólo aplaudían al cómico, sino también al físico.
Einstein miró a Chaplin, sin saber muy bien cómo reaccionar y Chaplin sonrió de medio lado.
“La gente me aplaude a mí porque me entiende”, dijo, “a usted le aplauden porque no le entienden”
Si os ha gustado, ya sabéis cuál es mi precio habitual. Descargad el cuento y enviadselo a vuestros contactos.
Y volved pronto a mi nueva cueva, que aquí os espera...
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
Hola, si te aplaudo ¿por cuál de las dos razones es? jeje, buenas de nuevo, ya veo que te ha pasado como a mi y te has acabado comprando un pequeño artefacto útil para captar redes, aunque sean... capadas. Un saludín.
ResponderEliminarMuy bien llevado de la anecdota al relato :)
ResponderEliminarEstá visto que los opuesto, hasta en este caso están más cercanos de lo que parece.
Lo triste es que seguramente no entendian a ninguno de los dos...
ResponderEliminarCuantos comentarios te llegan desde un pueblecito de playa de India? :) Pues ala, aqui el primero, de dos perdidos por el mundo que ya tienen ganas de una cervecita contando batallitas.
Nk, en cuanto pueda me leo tu aventurilla.
ResponderEliminarDEprisa, amigo/a mio/a, será porque las líeas rectas no existen, pero só los círculos.
Pelinkanos... Pero ¿que haceis en internet? ¡Venga a ver cosas, coño! Que nos teneis que enseñar muchas fotos y queremos el reportaje completito, jajaja.
¡¡Un abrazo a todos!!