Buenas tardes, amigos del murciélago.
Antes de nada, comentaros que, como podréis comprobar, he colgado un gadget de etiquetas, para todos aquellos que gustan de leer por géneros. Aún no he clasificado todos mis relatos (mi pereza es legendaria, así como mi inutilidad en estos lares), pero cuando termine podréis leer todos mis cuentos de terror, por ejemplo, si eso es lo que os apetece. La idea es que disfrutéis de variedad, pero minimizando el caos en el que poco a poco se iba sumiendo este blog.
Cambiando de tema, hoy, y durante algunas semanas, seguiremos explotando el género del micro-cuento.
Inspirándome en los anuncios por palabras, que siempre me han fascinado, he intentado escribir uns serie de mini-cuentos, que os iré regalando. Es curioso cuanto se puede decir con tan poco ¿verdad?. Bueno, pues aprovechemoslo como artificio literario.
De nuevo, quisiera invitar a todos aquellos aspirantes a narrador a que practiquen con este género. Y de nuevo, quisiera recomendarles elegir un tema antes de empezar, e ir escribiendo relatos a partir de las múltiples facetas de ese tema.
En este caso, inaugura la sección breve de "SE VENDE", que poco a poco iré engordando a medida que pasen las semanas.
Pero antes de leer, a los lectores puristas, quisiera advertirles, que si bien estos pequeños escritos suelen ser considerados como "micro-cuentos", en realidad no lo son.
Es decir, un microcuento conlleva una "micro-trama". En la sección "SE VENDE", generalmente, no la encontraréis de forma explícita (aunque implíctimanete se puede supener que sí existe una trama abstracta) porque lo que he buscado es la reflexión a través de la ironía. En ese sentido me acerco más a la prosa poética (si a esto le puedo llamar poesía, claro) que al relato.
Conviene tenerlo claro a la hora de escribir para que el resultado no suponga una cosa informe y sin vida, a medio camino de ninguna parte.
Y me dejo de milongas. Sin más preámbulos, he aquí el relato de la semana:
Se vende vida.
Cómoda y confortable; cálida en invierno y fresca en verano.
Garantizado trabajo, dietas y algún que otro capricho.
Posibilidades de promoción.
Abstenerse soñadores.
Espero que os haya gustado. La semana que viene más, que a eso habéis venido.
Os quiere vuestro amigo, el murciélago.
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
Antes de nada, comentaros que, como podréis comprobar, he colgado un gadget de etiquetas, para todos aquellos que gustan de leer por géneros. Aún no he clasificado todos mis relatos (mi pereza es legendaria, así como mi inutilidad en estos lares), pero cuando termine podréis leer todos mis cuentos de terror, por ejemplo, si eso es lo que os apetece. La idea es que disfrutéis de variedad, pero minimizando el caos en el que poco a poco se iba sumiendo este blog.
Cambiando de tema, hoy, y durante algunas semanas, seguiremos explotando el género del micro-cuento.
Inspirándome en los anuncios por palabras, que siempre me han fascinado, he intentado escribir uns serie de mini-cuentos, que os iré regalando. Es curioso cuanto se puede decir con tan poco ¿verdad?. Bueno, pues aprovechemoslo como artificio literario.
De nuevo, quisiera invitar a todos aquellos aspirantes a narrador a que practiquen con este género. Y de nuevo, quisiera recomendarles elegir un tema antes de empezar, e ir escribiendo relatos a partir de las múltiples facetas de ese tema.
En este caso, inaugura la sección breve de "SE VENDE", que poco a poco iré engordando a medida que pasen las semanas.
Pero antes de leer, a los lectores puristas, quisiera advertirles, que si bien estos pequeños escritos suelen ser considerados como "micro-cuentos", en realidad no lo son.
Es decir, un microcuento conlleva una "micro-trama". En la sección "SE VENDE", generalmente, no la encontraréis de forma explícita (aunque implíctimanete se puede supener que sí existe una trama abstracta) porque lo que he buscado es la reflexión a través de la ironía. En ese sentido me acerco más a la prosa poética (si a esto le puedo llamar poesía, claro) que al relato.
Conviene tenerlo claro a la hora de escribir para que el resultado no suponga una cosa informe y sin vida, a medio camino de ninguna parte.
Y me dejo de milongas. Sin más preámbulos, he aquí el relato de la semana:
SE VENDE VIDA
***
Se vende vida.
Cómoda y confortable; cálida en invierno y fresca en verano.
Garantizado trabajo, dietas y algún que otro capricho.
Posibilidades de promoción.
Abstenerse soñadores.
***
Espero que os haya gustado. La semana que viene más, que a eso habéis venido.
Os quiere vuestro amigo, el murciélago.
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
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