Hoy estoy aquí para compartir con todos vosotros un relato de “no-ficción”.
En realidad no nació como relato, y además rompo una de las pocas reglas que me he auto-impuesto; lleva consigo una moraleja. Por si fuera poco voy a cometer la herejía de acompañarlo de un vídeo en mi siguiente Post. Así que, hablando desde mi pequeña parcela literaria, es posible que pudiera bautizarlo como “no-relato” de “no-ficción”, pero a la hora de leer no hay diferencia entre una cosa y otra, y por lo tanto esta presentación es tan absurda como innecesaria.
Y sin embargo aquí está. Porque los Blogs son absurdos e innecesarios, y si nos ponemos a hilar fino, lo mismo podríamos decir del arte en general y de tantas y tantas cosas.
En fin, a lo que iba. Hace algún tiempo recibí un correo de mi buen amigo Jimmix, en el que criticaba la ignorancia que se ostenta en televisión. Todo empezó como una mail de respuesta, pero me había sublevado tanto el tema sobre el que escribía, que mi correo terminó siendo un pequeño relato.
Aquí lo tenéis, corregido y listo para su lectura. Leed una breve muestra:
LAS PINZAS SON PARA TENDER LA ROPA.
"[...]
-¿Y lo de las pinzas lo haces en otras partes de tu cuerpo?- pregunta el miembro femenino del jurado, los ojos brillantes de picardía.
-Puedo ponerme las pinzas en mis partes.
-¡¡¿Cómo?!!
-Que puedo ponerme las cincuenta y cinco pinzas en mis partes.
Risas y expectación.
-¿Lo harías ahora?- pregunta el tercer miembro del jurado, que tiene más pluma que el pato Donald.
-Hombre- responde nuestro protagonista, llevándose las manos a la bragueta-, yo he venío aquí a dar espectáculo, así que si se tiene que hacer pues se hace.
Y bueno, pues ya sabéis de qué va la historia. No pretendo hacer historia en la literatura con este cuento, pero me apetecía compartirlo con vosotros.
Recordad que se trata de una historia verídica, y recordad también que en unos días colgaré el video correspondiente para que veáis que no miento. Yo también tengo ganas de volver a verlo después de tanto tiempo, al fin y al cabo escribí mi pequeño “no-relato” de memoria, y me gustaría compararlo con la realidad para ver si me he inventado la mitad o realmente es tan impactante como recuerdo.
Así que lo dicho. Espero que os guste, que os haga sonreír o mejor aún, soltar una carcajada ruin cargada de catarsis. Si consigo eso, no olvidéis pasar el cuento a todos vuestros amigos, si es que aún no se han cansado de este murciélago malvado.
Ahora voy a salir volando, a ver si con la brisa me refresco las orejas.
Pasaos en un par de días para ver el vídeo, y recordad volver la semana que viene por…
¡UN CUENTO A LA SEMANA!
Me acuerdo como si fuera ayer de aquella noche! Que vergüenza ajena pasé y creo que pasamos.. pero no quita las risas y lágrimas que nos echamos!!! MUERCIEEELAAGOOO VEEEEN QUE YA EMPIEZAAAAA te gritaba a pleno pulmón!!! no tardastes ni un segundo en volverte a poner delante del televisor!!!
ResponderEliminarUN BESO MI MURCIELAGO!
Ahhh, mi niña de las pinzas rosas. MEnos mal que alguien lee mis chorradas.
ResponderEliminar¡Un beso infinito!